Arquetipos de Consciencia.

Saber.

¿Qué  sabíamos antes de comenzar a aprender?


Así como iniciamos la vida en el "Templo Sagrado de los Niños", en la etapa de adultos, nos desarrollamos dentro de "Arquetipos de Conciencia".

Los Arquetipos de Consciencia son las diferentes formas de pensar, sentir y movernos en la vida. 

Es la esencia de nuestra forma de ser que sirve y ayuda a otros en su vida.




Mensajes de Amor y Paz Interior.
Nuestras formas esenciales y ancestrales de Ser amor en la Vida. 


Arquetipos de Conciencia 

Los siguientes son los distintos  Arquetipos de Conciencia desde los cuáles experimentamos e impactamos en la vida otros.

Procura identificar cuál es el que te pertenece y podrás hacer un buen ejercicio de auto conocimiento. 

Arquetipo del Maestro de la Ley Divina.

Pertenecen a este grupo las personas que comparten lecciones y enseñanzas con aquellos que necesitan de un apoyo incondicional para poder crecer. 

No sólo tienen un bagaje de experiencia y conocimientos de sabiduría espiritual, sino que lo aplican en su vida y muchas veces más que con la palabra, con los hechos enseñan y transfieren equilibrio y sabiduría a los demás. 

Arquetipo del Sacerdote Universal.

Se refiere a las personas que ya conocen qué es lo que sí funciona en la vida y se convierten en ejemplo, no de lo que creen, sino de actuar en lo que genera resultados.

Son personas prácticas y directas que no tienen barreras psicológicas para desarrollar aquello que saben funcionará tanto en su desarrollo cómo en el de los demás. 

Arquetipo del Protector Celestial.

Son las personas que se encargan de mantener y sostener  equilibrio y armonía,  allá donde se encuentren.

Arquetipo del Apóstol de Dios.

Se refiere a las personas que generan fraternidad y una sensación de compañía altamente limpia con todos los que comparten su vida.

Arquetipo del Profeta Divino.

Son las personas que se encargan de purificar los detalles últimos que están más ocultos en el fondo de la conciencia del otro ser.

Arquetipo de Fuente de Vida.

Personas que tienen la capacidad innata de integrar las facultades de los arquetipos anteriores. 

Ser Fuente de Vida es tener la capacidad de que las personas  se enamoren de la vida; que tomen cambios internos profundos gracias a la presencia en su camino de una persona Fuente de Vida.

Todas estas capacidades no necesariamente son parte consciente de cada persona, sencillamente es parte de su realidad más íntima y profunda; al punto que no hacen estas cosas, sino que las provocan sólo por “ser” lo que ya son desde siempre, desde que se desprenden de los Templos de la Niñez. 


"Hay cosas que venimos a aprender en esta vida, 
y muchas de ellas nos cuestan mucho hasta integrarlas, 
pero otras, sencillamente lo somos antes de aprender nada".